"Ya es casi una cita obligada que, durante encuentros especializados en temas de prevención y seguridad, alguien mencione la responsabilidad que les compete a los medios de comunicación en la construcción colectiva de sensaciones de inseguridad urbana y tensión social. Un taller y la presentación de un libro vinculados al fenómeno de las “maras” centroamericanas, y su posible exportación hacia Europa, permitieron desarrollar la siguiente nota. Abrimos el diálogo e invitamos a nuestros lectores a enviarnos sus aportes.
26/4/11
Article ¿Los medios de comunicación calibran la temperatura de las percepciones de riesgo?
"Ya es casi una cita obligada que, durante encuentros especializados en temas de prevención y seguridad, alguien mencione la responsabilidad que les compete a los medios de comunicación en la construcción colectiva de sensaciones de inseguridad urbana y tensión social. Un taller y la presentación de un libro vinculados al fenómeno de las “maras” centroamericanas, y su posible exportación hacia Europa, permitieron desarrollar la siguiente nota. Abrimos el diálogo e invitamos a nuestros lectores a enviarnos sus aportes.
18/4/11
Mario Benedetti i Manlio Argueta
Avui us volem presentar una entrada del bloc del gran escriptor salvadorenc Manlio Argueta amb el títol "Mario Benedetti y El Salvador" realitzada amb motiu de la mort l'any passat de Mario Benedetti... un fraternal record...
"Con la muerte de Benedetti he querido hacer un recuento de los países visitados y no creo que se me quedó alguno, y han sido 35, la idea era recordar dónde conocí a Benedetti: en España, en Cuba, en Canadá. Me hizo ver también nuestra vocación undívaga como el mar, como decía el maestro Barba Jacob, en otras palabras la cultura andariega del salvadoreño. Y no solamente los intelectuales de élite, también los campesinos. Este tema lo he tratado en tres de mis novelas inéditas y algunos artículos sobre la diáspora.
¿Tantas vueltas para hablar de una persona? Sí, porque antes de escribir lucubro, medito y quiero ver la imagen que guardo: baja estatura, bigote blanco, aunque alguna vez fue negro cuando no era tan conocido, sonrisa tímida, piel blanca o “chele” (huero dicen los mexicas y venezolanos, canche los chapines, machos los ticos, gringos los argentinos).
Hay tantas crónicas sobre él en ocasión de su muerte y se lo merece el poeta de Poemas para Oficinistas, con lo cual popularizó su poesía entre las jovencitas sobre todo, motivó a pensar que algo fallaba en sus poemas. Liviandades explicables en un poeta es muy leído: se vuelve sospechosa su calidad, pues el poeta debe ser leído por pocos; pese a excepciones: Pablo Neruda y su Veinte Poemas de Amor; Roque Dalton y su poesía política.
Pero al grano: conozco unos cincos elementos de Benedetti con El Salvador. Comienzo con larga entrevista que le hizo a Roque Dalton Revista Marcha de Uruguay (marzo 1969). De esta cito frases que a veces se suprime en El Salvador, y por esa razón reproduzco:
Benedetti: ¿De cuál de los nuevos poetas salvadoreños te sientes más cerca? Roque Dalton: Fundamentalmente, de Manlio Argueta. Es un poeta de mi edad, que por cierto se ha convertido últimamente en un novelista muy valioso. La poesía de Argueta está dentro de una línea muy renovadora: es desenfadada, de gran amplitud temática. Hay también un muchacho nuevo, muy joven: Alfonso Quijada. No ha publicado ningún libro, pero conozco poemas sueltos que revelan un auténtico talento. También un poeta católico, David Escobar Galindo, muy joven también pero con grandes posibilidades de desarrollo. Y desde luego, Roberto Armijo, de mi promoción: no sólo como poeta, también como ensayista nos ha ayudado mucho a todos en el planteo de problemas sobre nuestra cultura nacional.
Benedetti: Y aparte de los latinoamericanos, ¿cuáles son tus poetas mayores? Roque Dalton: Tal vez un grupo de poetas franceses, muy disímiles entre sí. De cada uno he tomado algo. Pienso en Henri Michaux, Jacques Prevert, y (a pesar de que nadie me crea) Saint John Perse. Los leí casi simultáneamente y ejercieron una notable influencia sobre mí. También algunos poetas de lengua inglesa, como Eliot o Pound. Sin embargo, creo que mi poesía, sobre todo a partir de El turno del ofendido, se nutrió de otros géneros en mayor grado que de la poesía. Por ejemplo: la novela, el cuento, y hasta el cine. Conscientemente traté de propiciarme climas generadores de una actividad poética. (Nota.- Hago la observación para quienes piensan que Dalton y los comprometidos solo leíamos panfletos)
Benedetti también tiene un poema titulado “Roque”, del que transcribo un fragmento, poema que fue musicalizado por un cantautor uruguayo muy reconocido: Daniel Viglietti,
Le tenías ojeriza a la pureza
porque sabías cómo somos de impuros
cómo mezclamos sueños y vigilia
cómo nos pesan la razón y el riesgo…
ahora recorro tramo a tramo
nuestros muchos acuerdos
y también nuestros pocos desacuerdos
y siento que nos quedan diálogos inconclusos
recíprocas preguntas nunca dichas
malentendidos y bienentendidos
que no podremos barajar de nuevo
pero todo vuelve a adquirir su sentido
si recuerdo tus ojos de muchacho
que eran casi un abrazo casi un dogma
el hecho es que llegaste
temprano al buen humor
al amor cantando
al amor decantado
al ron fraterno
a las revoluciones
pero sobre todo llegaste temprano
demasiado temprano
a una muerte que no era la tuya
y que a esta altura no sabrá que hacer
con
tanta
vida.
Y por último debo decir dos cosas más: Un encuentro que tuve en Toronto, Canadá (1981) con dos uruguayos más, notables ambos: Eduardo Galeano y Daniel Viglietti: me reclamaron por qué los salvadoreños éramos tan hijos de puta –tragué gordo, lo somos pero no tanto para que se lo reclamen a uno con tanta emoción-; la causa del enojo era porque un salvadoreño, (miembro del jurado Casa de las Américas, en Cuba, junto a Mario Benedetti), le reclamó a éste diciéndole entre muchas cosas oportunista, porque había votado a favor de una poeta salvadoreña: Claribel Alegría, para darle el Premio a su libro Sobrevivo. El poeta colega salvadoreño le enrostraba a Benedetti que su voto por Claribel era viciado pues éste se hospedaba en casa de ella, en Deià, Mallorca. Claro, Benedetti se sintió vejado; sorprendido, además, que un salvadoreño protestara airado y en público porque se premiara a su compatriota. Esta conducta ya me fue difícil explicarles a Galeano y Viglietti.
Pero les aclaré que la actitud del poeta salvadoreño no tenía que pagarlo yo ni otros poetas, es como si se reclamase a todos los salvadoreños los asesinatos cometidos por las fuerzas de seguridad en la guerra sucia.
Pese a todo, convencí a Galeano y a Viglietti que tenían en mí a un amigo y admirador de Benedetti, pues su novela Gracias por Fuego me había señalado derroteros cuando siendo poeta decidí hacerme novelista. Más tarde, la amistad con ellos sigue siendo fraterna."
Manlio Argueta, 24 de mayo de 2009
10/4/11
Derechos humanos, ¿de quién?
"Es extraordinaria la selectividad que existe en los medios de información de mayor difusión de España en la cobertura de las violaciones de los derechos humanos hoy en el mundo. Cuando tales violaciones ocurren en Cuba, la noticia ocupa grandes espacios mediáticos. La liberación de presos políticos en aquel país, por ejemplo, ha ocupado una gran atención de tales medios, así como de los establishments políticos tanto de España como de la Unión Europea. El Parlamento Europeo, por ejemplo, dominado por los partidos pertenecientes a las sensibilidades conservadoras y liberales, ha pasado varias resoluciones sobre lo que llaman “la flagrante violación de los derechos humanos en Cuba”. Me parece bien que se denuncie la violación de derechos humanos en Cuba, pero me parece enormemente incoherente (para expresarlo de una manera amable) que se permanezca en silencio frente a las violaciones mucho más extensas y más dramáticas que las ocurridas en Cuba y llevadas a cabo en países gobernados por las derechas, tales como Colombia.
En realidad, este silencio muestra la falta de credibilidad de tales medios en su supuesta defensa de los derechos humanos. Lo que están haciendo es utilizarlos para promover sus puntos de vista políticos e ideológicos. No son las violaciones de los derechos humanos (que utilizan para sus fines ideológicos), sino su objetivo de promocionar su ideario político lo que motiva su atención a tal violación.
Hoy, uno de los países que está cometiendo mayores violaciones de derechos humanos en América Latina y en el mundo es Colombia, sin que los medios de información españoles de mayor difusión hayan informado sobre ello. Colombia ha sobrepasado este año a Sudán como el país que tiene un porcentaje mayor de personas desplazadas de sus hogares por causas políticas. De una población total de 44 millones de habitantes, 5,2 millones (casi el 12% de la población) han sido desplazadas por causas políticas, siendo los grupos más afectados por estos desplazamientos forzosos las poblaciones indígenas, tal como documenta el asesor jurídico de los Sindicatos del Acero de EEUU, Dan Kovalick, en su artículo “Colombia Slips Into the Abyss” (Counterpunch, 10-03-11).
Es probable que esta situación se acentúe con el Tratado de Libre Comercio con EEUU, pues facilitará las inversiones estadounidenses en la producción de aceite de palma, que es una de las causas del desplazamiento de la población indígena, conseguido por medios violentos y liderado por los infames paramilitares, que utilizan la lucha contra la guerrilla como excusa para expulsar a miles y miles de campesinos de sus tierras.
El Tratado de Libre Comercio entre Colombia y EEUU (presionado por las grandes corporaciones estadounidenses) tendrá un impacto muy negativo en el pequeño campesino colombiano, tal como ha ocurrido con semejantes tratados bilaterales de EEUU con México y con Haití. Como ha reconocido recientemente nada menos que el que fue presidente de EEUU Bill Clinton, el mayor promotor del tratado de libre comercio entre Haití y EEUU cuando fue presidente, tal tratado ha dañado a Haití. Cito directamente sus declaraciones: “El tratado bilateral con Haití favoreció a los grandes agricultores de mi Estado, Arkansas, pero ha dañado enormemente a los pequeños campesinos de Haití. Fue un gran error… Y tendré que vivir el resto de mi vida con el sentimiento de haber sido responsable del deterioro de la capacidad de producir alimento por parte del propio pueblo de Haití” (mencionado en el artículo de Kovalick).
Otra enorme violación de los derechos humanos es la situación laboral en Colombia. Según la Escuela Nacional Sindical (ENS) de Colombia, 51 sindicalistas fueron asesinados en 2010, y en lo que va de año ya se ha asesinado a cuatro sindicalistas (incluyendo tres maestros). Como escribe el mismo Dan Kovalick (esta vez en el diario Huffington Post, 09-03-11), este número de sindicalistas, 51, es idéntico al número de sindicalistas asesinados en 2008, cuando el candidato Obama expresó su desacuerdo con el tratado bilateral de comercio entre Colombia y EEUU. El candidato Obama se opuso a la ratificación del tratado, refiriéndose a los asesinatos políticos de los sindicalistas como la causa de su oposición. Un indicador más del abandono de muchas de sus promesas ha sido el hecho de que el presidente Obama, con el mismo número de sindicalistas muertos hoy que entonces, apoye ahora tal ratificación.
La situación de abuso que está ocurriendo en Colombia ha dado pie a que la Confederación Internacional de Sindicatos se oponga también a que se establezca un tratado bilateral entre la Unión Europea y Colombia semejante al que probablemente se aprobará en EEUU este año. Es probable que ambos parlamentos, el Congreso de EEUU y el Parlamento Europeo, que se llenan la boca hablando de derechos humanos, aprueben tal tratado.
¿Se imaginan ustedes qué ocurriría si fueran asesinados 51 sindicalistas en Cuba? Ocurre en Colombia y ni siquiera es noticia. ¿Dónde están los “grandes defensores de los derechos humanos” como Mario Vargas Llosa, José María Aznar, Bernard-Henri Lévy, Moisés Naím y otros? y ¿dónde se pueden leer los editoriales de los grandes medios de difusión protestando por tales hechos? Por cierto, cuando estoy terminando de escribir este artículo, leo en la agencia EFE que el abogado Ricardo Alberto Sierra, que representaba a los familiares de las víctimas de los paramilitares de la región del Pacífico (20.000 asesinados), acaba de ser asesinado ante su familia. ¿Hasta cuándo la comunidad internacional, supuestamente defensora de los derechos humanos, continuará con su silencio ensordecedor?"
3/4/11
Neix la la col·lecció “Postals des d’Amèrica Central”
Avui, Mirades Solidàries presenta la col·lecció “Postals des d’Amèrica Central” que s'estrena amb els tres primers quaderns, abordant tres temàtiques transversals de la cooperació al desenvolupament: Drets Humans, recursos naturals i gènere.
El primer de la sèrie és Una mirada a la situació dels Drets Humans a l’Amèrica Central. Es tracta d'una recopilació de les dades més rellevants recopilades en els dos últims informes de DDHH que ha realitzat la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (Fespad), on es mostren alguns casos reals de vulneració de drets fonamentals en diferents països d’Amèrica Central i una breu ressenya del context social i polític de la regió, entre d’altres.
El segon quadern, sota el títol Recursos Naturals i Transnacionals , pretén ser un informe-denúncia del model de desenvolupament tecnoindustrial, basat, principalment, en l'individualisme i el consum, que s'ha adoptat als països de Amèrica Central. El turisme, l'extracció minera i les poblacions camperoles, els mercats internacionals i l'explotació dels recursos naturals són alguns dels punts que es tracten amb cura en aquest quadern.
Finalment, el tercer quadern, El gènere, una qüestió d’imatge, és una edició que s'articula en set capítols -tants com els països que integren Amèrica Central- que exposa el problema de la sobrerepresentació que existeix al món i, més concretament, a Amèrica Central, dels homes envers les dones. Es descriuen actituds sexistes que deixen en una posició inferior a la dona i s'aborda el problema de la violència exercida pels homes sobre les dones com un problema transversal.